JOSÉ MANUEL RODRÍGUEZ VIEDMA: Poesía y misticismo

José Manuel Rodríguez es un poeta granadino que comenzó a dar sus primeros pasos dentro de la literatura a los nueve años. Ha publicado obras como “Suspiros de un Alma”, y “A la Orilla del Recuerdo (a lágrima viva)”, y fue realizador y presentador del programa “Encuentro Cofrade” en 1992. Su poesía llegó a mis  manos de forma casual gracias a Sebastián Aguilar, y tras la lectura de sus versos no dudé en entrevistarlo:

«Me confieso cristiano practicante y pecador por convicción»

Hola José Manuel, ¿De donde surge tu interés por el verso?
Me atrevería a decir que desde siempre. Pero sería una ironía. La vida está llena de momentos indescriptibles y quiero pensar que en uno de ellos, la musa me cogió de las manos y a estas alturas aún no me ha soltado. Aunque a veces siento que soy yo, quien no deja que se me escape. Hay grandes personas a las que recuerdo cada vez que comienzo un poema. A mi abuelo y a  Manuel Benítez Carrasco. Cada uno de ellos, a su medida, llenó mi vida de esos momentos indescriptibles.

¿Qué poetas o escritores te influencian más directamente tu obra?
Las obras literarias, como los sentimientos más personales, solo son influenciadas por uno mismo. Cada cual es dueño de sus propias decisiones, pensamientos y palabras. Más tarde, son los propios lectores los que con sus acertadas críticas, buscan ciertos pareceres que les hacen recordar otros escritos. La mente almacena diariamente miles de sensaciones que luego, cuando llega el momento de plasmarlos sobre el papel en blanco, intentan mantener una armonía entre cada rima o cada verso.  Los poetas andaluces, guardamos cierta similitud al plasmar los colores que nos ofrece la mente llegado el momento. La propia forma de vida y los mismos sonidos del agua. Federico García Lorca, Antonio y Manuel Machado o el propio Manuel Benítez Carrasco. Otros grandes poetas como el murciano Miguel Hernández, o Gustavo Adolfo Becquer, si queremos beber del autentico amor a borbotones, guardan un buen espacio en mi lectura, quizás a ellos les deba en cierto modo, gran parte de mi inspiración. Sin olvidar a San Juan de la Cruz o Santa Teresa de Jesús.   

“Suspiros de un Alma” ve la luz en 1990, y “A la Orilla del Recuerdo(a lágrima viva)” se edita casi 10 años después. El profesor Francisco Sánchez-Montes describe esta última como una continuación de un camino ya trazado. ¿Qué diferencias destacarías entre ambas publicaciones y hacia donde caminan a día de hoy tus últimos escritos?
El Profesor de Historia Moderna, Francisco Sánchez-Montes, quien además de tener una enriquecedora pluma, es una excelente persona, a la que siempre estaré agradecido. En aquellos años de colaboración laboral universitaria, tuvo ocasión de leer mi primer libro “Suspiros de un alma”.  Creo que al referirse con sus palabras, a un camino ya trazado en el prólogo de “A la Orilla del Recuerdo”. Puso de manifiesto la continuidad del estilo propio del autor de ambas obras, refiriéndose a mi persona. Un estilo marcado, a la que esta ocasión se unía de una manera especial, la madurez que alcanzamos con el paso del tiempo.  La vida nos enriquece, nos enseña a valorar todo aquello que tenemos a nuestro alrededor y nos hace más vulnerables en todos los sentidos. En ambas obras, el amor es el auténtico protagonista y con la madurez, también el amor, se hace más dulce y más complejo.
En la actualidad, dos nuevos trabajos literarios esperan ver la luz en un menor trascurso de tiempo. (Diez años es demasiado). Próximamente, coincidiendo con la fecha de la Feria del Libro, y si Dios nos lo permite, será presentado el libro “72 horas Buscando Amor”. En esta ocasión, siendo infiel al verso y profundizando de una manera más intimista, utilizando la narrativa, para llegar siempre de una manera personal a entablar una búsqueda incesante del amor. (Tendréis una invitación personal de dicha presentación).  De igual manera, voy dando forma al que será mi cuarta obra, en esta ocasión, (nunca la he dejado) en poesía, bajo el titulo “Poemas Dormidos, para Almas Despiertas”  del cual, algunos versos se pueden leer en mi blog oficial.

Versos personales, íntimos, e infinitas reminiscencias a la soledad, el amor, la pasión… Corrígeme si me equivoco, pero no destacaría en tu poesía un compromiso social firme salvando textos como “Entre Dos Luces”, o “Un Grito De Ira”. ¿Consideras importante retratar la realidad socio-política a través de los versos al modo Miguel Hernández, García Lorca, o Rubén Darío?
Quizás en la lectura de los versos de Miguel Hernández o el propio García Lorca, hubiéramos destacado en menor proporción, como bien dices, la realidad socio-política, si sus vidas hubieran transcurrido en una etapa más dulce, que la que desgraciadamente les tocó vivir. Como anteriormente te comentaba, en la obra de cada uno de los poetas, existe un fiel reflejo de la propia vida de a pié. De igual forma que cada uno de nosotros reflejamos nuestro estado de ánimo en el rostro, los escritores y poetas  como los artistas en general, escultores, músicos, pintores… reflejan de igual modo en su obra el estado terrenal en el que se encuentran. Cierto es que en nuestros días, y lejos de  hacer comparaciones con aquellos años oscuros de la guerra entre las dos Españas, pues no nos encontramos en el “Olimpo de Dioses” disfrutando de la paz mundial y sosiego eterno de las culturas. Ya que tenemos el azote del maltrato y la violencia de género, el hambre que continua llevándose de un bocado negro a niños indefensos, la falta de libertades, la adolescencia mal entendida y la educación mal llevada, entre un sin fin de calamidades que nos azotan el cuerpo y el alma… Quizás por todo ello, ¿por qué no? buscar de vez en cuando, el poema que nos traslade, que nos enseñe otra forma de vida ¡que es posible! Que nos hable de amor, que nos incite a amar entre todas las cosas y en definitiva nos enseñe a vivir y si es posible, a vivir mejor.     
            Estoy totalmente de acuerdo y con toda seguridad, verás  reflejadas en mis obras, sobre todo en las que están por llegar, una realidad socio-cultural más comprometida y más real. Aunque quizás y solo en ese instante, dichas realidades nos permitan conocer de una manera más trasparente al autor, a la persona… Pero el poeta, el artista en definitiva, debiera tener más de un pié en otra dimensión, en otra frontera. En este mundo querido amigo, apenas hay espacio para un político más.

Fuiste presentador del programa “Encuentro Cofrade” en 1992, y eres autor de la letra “Prendimiento y Merced” de la distinguida cofradía almeriense. En tus versos existe un reencuentro continuo con la exaltación religiosa, saetas o marchas de procesionales ¿Cómo repercute la religión en tu proceso creativo y en tu vida cotidiana?
Apenas con doce años comencé mi andadura cofrade. Mucho tiene que ver mi hermano mayor, quien en los años ochenta, junto con un grupo de amigos y compañeros de clase, en el Colegio de los Salesianos de Granada, se dispusieron a crear una Cofradía de Semana Santa. Yo tuve la suerte de estar pegado a él, e ir creciendo junto al resto de mi familia en tales aspectos. Las Cofradías organizan cientos de actos culturales, entre los que se encuentran los Pregones de Semana Santa, presentaciones de carteles, charlas, tertulias exposiciones y un largo etcétera. Recuerdo como si fuera ayer, la primera vez que me subí a un  escenario y recité un poema. Lo demás, amigo Juan, ya es historia y presente. Como cofrade en activo, he estado allí donde se me ha requerido. He colaborado como letrista con diferentes Orquestas o Sinfónicas, además con agradecimiento a quienes han estimado elegir mi persona para tales actos. De hecho, pienso que no están para nada alejados los compromisos culturales con los cofrades, es más, aunque el motivo principal en las Cofradías, sea una manifestación pública de fe y posterior estación de penitencia, en grandes dosis, la cultura, juega un papel importantísimo.  No solo en los pregones, quienes no pocos afirman que bien pudieran formar parte de un nuevo género literario, sino la propia imaginería de las tallas que forman nuestras imágenes. Nombres como Ruiz del Peral, Mora, Risueño, Mena… grandes orfebres, pintores, tallistas. En definitiva una brillante andadura, donde también grandes nombres de la literatura, dejaron el  magisterio de su palabra en tales índoles. El propio Federico García Lorca, o Manuel Benítez Carrasco, entre otros muchos.
Supongo que a la hora de crear una obra, todo obedece en principio, a la forma de ser de cada uno en su  interior. Las creencias, las ideologías, los gustos y los colores. En la misma persona han de confluir el artista y el ser. Si solo nos quedáramos con una de las mitades, sería tal cual, leerse un libro a medias, y esperar que fuera otra persona la que tratase de contarte el final. Me confieso cristiano practicante y pecador por convicción. Aunque tengo mis limitaciones, dudas y no estoy en todo de acuerdo con algunas doctrinas, siempre doy gracias a Dios cuando termino un trabajo.  

Parte de tu carrera gira en tono a la narrativa, de hecho da la impresión de que por motivos “virtuales” y el avance de las nuevas tecnologías, la poesía esté quedando obsoleta para muchos jóvenes a favor de otros géneros literarios. ¿Qué papel juega en la actualidad la poesía, y en que medida puede servirse la misma de Internet para crecer?
Muchas preguntas en una. Pero vayamos por partes. Si tuviera que catalogarme de alguna forma, me atrevería a decir que me considero ante todo un poeta, que en no pocas ocasiones y con cierta osadía,  introduce los dedos en el tintero de la narrativa. Son muchos los trabajos que he tenido que realizar dentro del citado género, aunque he de reconocer, que incluso entre líneas, al final, se puede describir como en no pocas ocasiones, de la narrativa a la prosa, es capaz de resurgir un nuevo verso. No obstante, el cambiar de tercio en algunas ocasiones, solo se debe, te lo aseguro, al capricho de las musas.
Por otra parte, las nuevas tecnologías juegan un papel importante en todos los sentidos, y pienso que todos los géneros tienen suficiente espacio y capacidad para albergar un lugar importante en su interior. El que se lea más o menos poesía en nuestros tiempos, quizás sea porque su propia lectura, necesite de mayor concentración e incluso de un lugar y una compañía. Mientras me puedo imaginar la forma de leer el final de una novela entre el bullicio y los empujones de la boca de un metro, no me hago a la idea, de intentar compaginar de la misma forma un soneto de Vicente Aleixandre. La poesía, como el buen vino, siempre requiere de tiempo y esta vida, cada vez con mayor atrocidad se empeña siempre en correr. De todas formas, que la lectura en general no esté de moda, quizás sea una menor preocupación. Por lo contrario, lo que debemos de procurar, es que no sea nuestra propia cultura, ni  la de los jóvenes, la que se encuentre en decadencia.
La poesía e Internet juegan un papel importante entre ambas. Que incongruencia,  gracias a Internet, ya no hace falta papel para leerla. ¿Y para entenderla? – Eso ya es harina de otro costal.

¿En que medios has publicado recientemente?
De manera puntual, tengo un compromiso adquirido con diversas revistas, entre las cuales se encuentra “Gólgota” que edita la Real Federación de Cofradías de la Semana Santa de Granada o “Granada Rociera”  de la Hermandad del Rocío de Granada. La preparación de mi nueva obra, es la culpable de haber absorbido el mayor de mi tiempo en los últimos años, y no haber podido permitidme tener una mayor amplitud en dichas participaciones. Aún así, no es raro encontrarme algún que otro verso, en sitios y lugares, donde apenas podía acordarme con certeza de mi participación. Lo mismo ocurre con algunas páginas web, o blog que amablemente me han solicitado algunos escritos, sin olvidar aquellos proyectos que están por llegar y que espero me permitas omitir, hasta que de quien procede, no lo haga público. Aprovechando esta ocasión, a todos entre los que incluyo la Asociación que presides, para dar las gracias por el interés mostrado hacia mí persona.

Para aquellos que empiezan a interesarse por la poesía y hacen sus primeros versos ¿Qué consejo les darías?
Siempre ser ellos mismos. No influenciarse por nada, ni por nadie. Tener en cuenta todos los consejos, que no es lo mismo, y llevar a cabo aquellos que puedan hacerte mejor persona. Estar siempre de acuerdo con lo que se escribe, sin que con el tiempo te encuentres separado, entre lo que has creado y quien eres de veras en la soledad de tu habitación. Les diría que siempre se encuentren a gusto con lo que hacen, sin pensar demasiado en el futuro de sus ventas. Sin meditar, si la poesía puede o no tener, un camino fácil para poder lucrarse con ella.  El poeta nace para crear, para sentirte a gusto consigo mismo. Solo de esa manera, podrá en algún momento con sus versos, hacer sentir a gusto a los demás. Así todo habrá merecido la pena y te olvidarás del precio que pagaste por ello.

¿Con que otras actividades compaginas la escritura y la poesía?
La música. Me encanta tocar la guitarra española y cada vez que dispongo de tiempo, intento aprender con la ayuda de un profesor. Lástima. Las  manos se me dan bien solo con otros géneros. (Los literarios.) Y aunque pongo todo el empeño, mi mujer y mis hijas valoran muy positivamente cuando hago lo contrario y dejo de tocar. ¿Por qué será?

Bien, hemos llegado al final, agradezco de verdad nos hayas concedido parte de tu tiempo ¿Algún mensaje final para nuestros lectores?
Agradeceros nuevamente el tiempo compartido y animaros a seguir con la tarea que desempeñáis,  por el bien de la cultura en general. Nada cae en saco roto y cualquier ayuda para poder entenderla y conocerla mejor (la cultura) siempre va en beneficio de todos. Animo a vuestros lectores, a seguir buscando en cada verso, en cada poema, o en cada renglón, sea cualquiera de los géneros literarios, una nueva forma de pasar el tiempo. De trasladarse de alguna u otra forma en cuerpo y alma por el enigmático camino de las metáforas. Soñar aún no se ha digitalizado, sigue siendo gratuito y lo que es más importante, propio e intransferible… Los libros están cargados de ellos.

Un abrazo a todos.


Entrevista: JM.Salas

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